jueves, 18 de junio de 2009

Esos dias pegajosos...

Hoy es uno de esos días pegajosos, y no lo digo solo por el calor, si no también porque es uno de esos días en el que el mundo se te viene abajo a mitad de mes y piensas que aun quedan muchos días para que acabe, con lo cual, tu agonía se ira alargando hasta entonces.
Me siento triste, enfadada, como deprimida. No se, me siento rara. Y no consigo entender porque existen estos días en los que te sientes así de bajón y depresivo.
Tengo varios porqués, hoy si es el día de los porqués, pero a pesar de ellos, se que si no tuviera ningún porque también estaría igual. Hoy es uno de esos días en los que no te quieres levantar de la cama. Quieres quedarte bajo las sabanas creyendo que allí estas a salvo de todo, pero en realidad no estas a salvo de nada. Solo te evades del mundo durante un día, hasta que por fin sales a la calle, levantas la mirada al cielo y piensas, hoy tengo que seguir caminando.
Podemos tomarnos el respiro de un día, un día para quejarnos, para lloriquear, para sentirnos tristes, para sentir nuestro mundo hundirse poco a poco, pero solo un día, no hay más.
Mañana volveremos a levantarnos, a secarnos las lágrimas, a seguir caminando sin queja alguna, y sobretodo a levantar nuestro mundo otra vez.

Casi no tengo ganas de escribir, pero lo hago, necesito tener un momento en este odioso día para poder desahogarme, poder respirar, y ahora lo he encontrado.
No me siento mejor al estar escribiendo esto, sigo sintiendo algo puntiagudo dentro de mí que no me deja de doler. No me da tregua ni cuando escribo. Mi corazón tiene pequeños pinchazos de ansiedad. Pero por alguna extraña razón necesito escribirlo.

Hoy es uno de esos días en que era mejor quedarse en casa y no venir a trabajar. No mirar el correo electrónico, o el teléfono móvil. No mirar las cuentas bancarias, o no coger el autobús. Pero lo hice. Y mañana volveré a hacerlo. Pero tendré mi día para no salir de debajo de mis sabanas y pensar que mientras este ahí no me pasara nada.
Buscando un sitio donde estar a salvo de toda tristeza o de todo mal. De cualquier responsabilidad con la vida.
Odio tener responsabilidades, me causan ansiedad, me causan desesperación. Pero no puedo evitarlas, no soy de esas personas.

Mañana imagino que será otro día, aunque los problemas van a seguir ahí, al menos hasta final de mes.
Espero no cansarme en el camino, no desesperarme o no saber levantarme.
Espero saber aguantar el chaparrón.

Tengo sueño, estoy cansada, quiero irme a casa a meterme en la cama y dormir. Que el día se acabe. Que la semana se acabe. Que el mes se acabe.

No hay comentarios:

Publicar un comentario