lunes, 4 de mayo de 2009

Mi madre


Ayer fue el día de la madre. Este es el primer año que no sentí tristeza, de echo pase el día tranquilamente con mi música y mis libros. Pero tuve tiempo de felicitar a mi abuelita y como no a mi mama.
Se que desde el cielo debería de estar viéndome, pero hace mucho deje de creer en eso de que existe un cielo y esas cosas. En verdad cambie esos pensamientos por los de que el alma se libera del cuerpo y viaja a donde quiere. Creo que mi madre querría estar con nosotros cuidándonos como no ha podido hacerlo estos años de ausencia y protegiéndonos de todo mal.
De hecho me siento realmente fuerte cuando pienso en ella.
Querría dedicarle unas palabras en mi blog, unas palabras que es posible que no haga falta escribir porque ya sabrá, pero si estuviera aquí a mi lado en este momento y pudiera leer esto que estoy escribiendo me gustaría que leyera algo que la hiciera emocionar.

Es la mejor madre del mundo y digo es porque para mi nunca se ha marchado, la siento muy dentro de mi, tanto que a veces creo poder tocarla, aunque solo sea en sueños. Aun oigo su voz en mi cabeza, tras de mi, siempre hablándome, dándome consejos, dándome consuelo, abrigándome en las noches de frió y soledad, caminando conmigo por las calles del mundo, viendo la vida a través de mis ojos y saboreando cada aliento de felicidad que yo saboreo. La siento vivir a través de mí, disfrutar como nunca ha podido, y eso me tranquiliza.
Es mi mayor motivo a seguir viviendo. Siempre lo ha sido.
Cuando estaba viva era lo único que tenia, para mi no había nada mas que ella. La cuidaba, la protegía, daba mi vida porque siguiera respirando.
Cuando la perdí todo eso desapareció, no me quedo nada. El tiempo se me hizo un infierno, la soledad mi mejor amiga, y el silencio llenaba los huecos vacíos de mi alma.
Pero un día desperté y comprendí que no podía ir cayendo, que no podía dejar de respirar porque ella no estuviera aquí, que debía seguir viviendo.
Y entonces busque una razón para vivir, porque siempre la tiene que haber. Y después de buscar, creo haberla encontrado.
Busque bajo piedras, busque en inmensos océanos, busque en lejanas lunas, y al final me encontré a mi. Supe que era la razón autentica por seguir viviendo, por mí y por ella.
Ella me dio la vida. Ella se sacrifico por mí. Ella sigue aquí a mi lado después de todo, para que siga viviendo. Ella me da la mano cuando me caigo. Ella esta conmigo cuando sueño. Ella me anima cuando lloro. Ella siempre ha estado ahí.
Ella sigue siendo mi primera razón para la vida. Y detrás voy yo.
Aunque físicamente no este, no quiere decir que se haya marchado.
Si pudiera verla hoy o ayer la diría mil cosas, la diría cuanto la quiero, cuanto la amo. La diría que es la mejor madre y una gran mujer. La diría que de mayor quiero ser como ella y tener ese gran corazón que solo ella ha sabido tener.
La echo de menos. No pasa ni un solo día que no piense en ella. El vació de mi corazón no se ha llenado, y se que nunca se llenara. Su ausencia lo es todo, pero su presencia lo es aun más.
La quiero con toda mi alma. Creo que no sabré querer a nadie más en el mundo como la quiero a ella. Mi amor es grande, es inmenso e infinito.
Cada día sigo pensando que daría lo que fuera por volverla a ver. No puedo esperar al día que me muera para que nuestras almas se reencuentren.

Os animo a que no dejeis de querer a vuestra madre madre, y que no perdais el tiempo en odiarla. No son perfectas, son personas, y tienen defectos, pero son nuestras madres y nos dieron la vida, y por ello hay que estar agradecido aunque a veces pensemos que es mejor no haber nacido, la vida se puede cambiar, eso es lo divertido de estar vivo :)

"El regalo mas grande" - de Tiziano Ferro, escucharla, es muy bonita :)

2 comentarios:

  1. Tus palabras hacia tu madre son preciosas. Yo siento lo mismo con mi abuelo. Siento que me acompaña a donde voy y que me protege en casa. Me siento segura pensando que de alguna forma me acompaña siempre y así le extraño un poquito menos. Cada día tengo un pensamiento para él.
    Besos.

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  2. Son preciosos los sentimientos que describen lo que quieres a tu madre.
    Me alegro que esta vez te encontrases mejor,sobretodo que te hallas encontado a ti misma.
    Y aunque tampoco creo mucho en eso del cielo.Si que creo que tu madre sigue contigo,cuidándote,ayudándote a levantarte en los malos momentos,y sobre todo orgullosa de ver que su pequeña se ha convertido en toda una mujercita,con un corazón enorme.Y que da y todavía le queda mucho que dar de si misma.

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